Soleá.

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Nunca valoramos lo que tenemos hasta que lo perdemos, y cuando lo perdemos nos damos cuenta de lo que realmente es la...

Soledad, circunstancia de estar solo o sin compañía, sentimiento de tristeza o melancolía que se tiene por la falta, ausencia o muerte de una persona. Soleá. 

Ya me había avisado en su momento la conciencia y quién avisa no es traidor. 

Cuando una persona se va de tu vida, se te pasan por la cabeza mil y una cosas. Primero te ríes, porque no te lo crees. Es algo tan irreal que no puede ser cierto. Luego piensas, este hombre me está gastando la broma más pesada del mundo. También cabe la opción de que te esté poniendo a prueba para ver como reaccionas. O que es una especie de karma, por alguna "broma pesada" que tu le hiciste anteriormente. Sin duda alguna, lo primero que piensas, es que te está vacilando. 
Después de la fase me está vacilando, te planteas seriamente que puede ser cierto. Que realmente, se va. Y empiezas a recordar todo. Todo viene en masa a tu mente. Desde la primera letra que le escribiste. La primera conversación. El primer SMS. Los momentos buenos y malos, sobre todo recuerdas los buenos. Las experiencias vividas. Las cosas inolvidables. El primer beso. El primer invierno durmiendo juntos enroscada a su cuerpo. El primer viaje juntos. Las primeras vacaciones. La primera romería. La primera vez. La primera cena. El primer aniversario de mes. El primer cumpleaños. El primer video. Vuestra canción... Te paras a pensar en tantas cosas vividas, que no sabrías que hacer si esa persona se va. Te dejaría, sola, con una vida hecha hasta el último suspiro. Con una vida en la que él estaba en todos los planes. Una vida en la que tu girabas a su ritmo alrededor de él. Todas las primeras veces se te pasan por la cabeza. 
Y las lágrimas comienzan a caer por las mejillas por si solas. No sabías que estabas llorando, tu cuerpo comienza a hablar.  
Derramar una lágrima es la más pura definición de dolor, tristeza o alegría. Es una forma de descarga vital para expresarnos, salir adelante o demostrar lo que nos sucede.  A veces es la única forma que tenemos para canalizar toda la mierda que pasa en nuestro interior, y no sabemos como expresarnos. Es como hablar con alguien, pero en este caso no habla nuestra boca, sino nuestro cuerpo. Este habla en cuanto a emociones y hechos. Atendiendo a sentimientos que están y estarán por mucho tiempo. Notando toda la tinta que fluye debajo de tu epidermis. La que en su momento él fue tatuando en tu piel a rojo. 
Tu ser ahora se pregunta que hacer con todo eso ahora que él no está. Ahora que él se va a su otra vida. Ahora que tu te quedas abrazada a soledad y a sueños rotos.

 Un mundo que empieza a caerse, piedra a piedra, sueño a sueño, momento a momento, recuerdo a recuerdo... Un mundo que jamás volverá a ser igual. 

Nunca valoramos lo que tenemos hasta que lo perdemos, y cuando lo perdemos nos damos cuenta de lo que realmente es la soledad. Alguien que nos enseña más que cualquier compañía. 

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